La llegada de un nuevo integrante que se suma a la familia genera múltiples cambios, el cual abarca a todo el núcleo familiar, en esta ocasión hablaremos de cómo se siente una mascota a la llegada de un bebe a la familia y cuáles deben ser los deberes familiares para que reine la armonía en esta unión. El afecto familiar que se le da a un perro o a un gato se compara a la llegada de un bebe, sin embargo al momento del crecimiento de una pareja con la llegada de un bebe real, suele ocurrir con frecuencia el desplazamiento hacia la mascota.

Esto ocurre por el raciocinio humano y sobreprotección hacia su progenitor, el cual el peso sentimental y afectivo recae hacia el infante, mientras la mascota ve trascender estos cambios, el cual hace notar en su comportamiento que puede ser desde agresividad, hasta baja autoestima, influyendo en su alimentación, en su trato con los humanos que lo conocían y los nuevos a conocer. Al haber pasado mucho tiempo con la mascota y permitirle entrar en la privacidad humana sin ningún tipo de restricción, le crea un habito dominante el cual lo refleja con mayor amplitud al momento que estos afectos se le quita.

La mascota nota la llegada del infante desde su estado pre-natal, con sus sentidos sobre agudizados es capaz de sentir los olores en los cambios hormonales, la mascota nota el cambio de actitud de la familia, y como es muy común la sobreprotección hacia el infante, suelen principalmente restringirle los espacios después de haber disfrutado durante mucho tiempo, el humano aleja a la mascota hacia habitaciones retiradas o simplemente lo deja en el patio.

El adiestramiento en la mascota es vital e influyente en la aceptación que esta tenga hacia la llegada de un bebe a la familia, si no se toma importancia en las características dominantes que se debe tener hacia una mascota esta podría optar por tomar un comportamiento autodidacta, el cual es el que debemos evitar. Su adiestramiento correcto recae en la cabeza familiar, viéndose en la obligación de enseñarle a la mascota su lugar en la familia, señalando las restricciones de manera amena sin maltrato animal y teniendo una actitud carismática hacia la mascota el cual influirá respeto, el paseo cotidiano y el ejercicio permitirá nutrir a la mascota recreativamente de tal modo que su estado en la casa sea un poco más apaciguado.

Como presentar él bebe a la mascota

La presentación familiar debe llevarse a cabo con suma responsabilidad, evitado el fracaso, pues un error constituiría a una lesión de por vida tanto física como emocional en el núcleo familiar. Ya la mascota percatándose de la llegada de un nuevo integrante en el proceso pre-natal, es decir en el embarazo, la mujer embarazada debe ejercer contacto con la mascota sin ningún tipo de miedo, ni perjuicios hacia ella, dándole accesibilidad a que en su memoria sensorial del olfato se agreguen estas nuevas experiencias.

A la hora de la llegada del bebe y cuando ya se sostiene en brazos, no debe dejarse a un lado la protección, pero no estimular la sobre-protección, permitiéndole a la mascota, que conozca la habitación del infante, llenarlo de afecto y caricias cuando la mascota lo demande y en su debido tiempo con carácter de la autoridad humana, darle permiso a la mascota de que esta olfatee al nuevo integrante, mas no permitir que la mascota busque por si sola descubrir que es lo que tienen en brazo sus miembros de la familia.

Una mascota aseada, ejercitada y bien alimentada es una mascota sana, tomaremos nuestros criterios de presentación solo si nuestra mascota esta en total equilibrio, si no es así, la recomendación es ayuda de un adiestramiento profesional.